En
los últimos años, Ecuador ha sido testigo de un alarmante incremento en las
estafas piramidales, afectando a miles de ciudadanos. Estas estrategias
fraudulentas, disfrazadas de oportunidades de inversión con promesas de
rendimientos rápidos y desmedidos, han atraído a inversionistas incautos que,
motivados por la expectativa de obtener grandes ganancias en corto plazo, han
caído en su red. Las pirámides suelen ofrecer tasas de interés excepcionalmente
altas, asegurando el retorno de la inversión en plazos inverosímiles, una señal
de alerta.